MASCARAS DE ORDEN Y DE JUSTICIA, CARRERAS, INCENDIOS Y VARIOS

MASCARA FACIAL DUEYA

MASCARA FACIAL DUEYA MASCARA FACIAL DUEYA

ESPECIFICACIONES:

Ref. : MFANT-84

Sección : MASCARAS FACIALES

Subsección : MASCARAS FACIALES

País : COSTA DE MARFIL

Etnia : GUERE

Época de la Pieza : Primer tercio siglo XX o anterior

Materiales / Técnica : Madera, fibra,pelo, metal, piel y pigmentos.

Altura : 26.00 Cm.

DESCRIPCCIÓN:

Los Gueré son conocidos y temidos por sus conocimientos y poderes mágicos. Sus máscaras son deliberadamente horrorosas, pues cuanto más horroroso es su aspecto más temida y respetada es su palabra. Estas máscaras y los ropajes de sus portadores van cargados de símbolos destinados a aterrorizar, como pelos, plumas, cuerdas, rafia y dientes de animales. Sólo los iniciados pueden esculpirlas. Y, a veces, no son “fabricadas” sino “encontradas” lo que les añade un halo de misterio suplementario.

La máscara y su portador forman un único ser. El hombre y el objeto desaparecen para dejar paso a la “máscara”, encarnación de una entidad precisa, cargada de personalidad y de fuerza.

Estas máscaras tenían funciones de vigilancia, servir a la justicio y alejar a los malos espíritus del poblado, una de las constantes africanas. En las festividades religiosas transmite la voluntad de los antepasados a la comunidad. También se ocupa de hacer pagar las deudas, oponerse a los adulterios y de vigilar la seguridad de las madres y de sus hijos menores. 

 Cuando esta máscara va a pronunciar una sentencia las mujeres deben regresar a sus casas. En principio, administra la justicia únicamente a los hombres. Cuando surge un conflicto importante entre dos mujeres de alto rango social, son los hombres quienes las remplazan para acudir a presentarse ante la Dueya.  La parte perdedora podrá recurrir ante otra Dueya de otro pueblo vecino.

También ejerce funciones de información, en este caso equivale a la máscara Dugué de los Dan.

A mediados de los años sesenta, en Abiyán, cuando el autor de esta pequeña reseña adquirió y colgó esta máscara en un lugar de su domicilio, su "boy" o empleado en las tareas domésticas, lleno de pánico al verla, se negó a entrar mientras no se retirara de su vista. Hubo que esconder la máscara durante varios años.  Según la sociedad secreta a la que se pertenezca se puede tener prohibida la visión de ciertas máscaras. 

LOCALIZACIÓN